lunes, 15 de enero de 2007

Suicidios por prepotencia

(el silencio no fue por vacaciones sino por trabajo, pero bueno)
El mismo día leímos estas dos noticias:
Bush pide perdón por los errores cometidos en Irak, y A LA VEZ, EN EL MISMO DISCURSO anuncia que manda 22.000 soldados más para ese país sometido. Más muertes, serán, de irakíes, y también de jóvenes norteamericanos.
Chávez, al mismo tiempo que asume otro período como presidente, anuncia que reformará la constitución de su país para poder ser reelegido indefinidamente.
¿No es parece increíble la prepotencia?
¿Es que el poder enceguece con tan fácilmente?
Pero también funciona como pegajoso reptil que ahoga al que lo ejerce, cuando queda adherido a la prepotencia, en vez de ejercerse como servicio.
Son, probablemente, dos suicidios anunciados: suicidios afectivos, políticos, morales... también físicos, lo serán en su momento.
Lástima que antes habrán caído víctimas inocentes, habrán dejado mucho sufrimiento gratuito.
Mientras tanto, creo que la humildad es muy buena amiga de la vida.
Y la soberbia, prima hermana de la muerte.
Nuestro "Teo" mira, desde arriba y desde adentro. Se estremece, seguramente, por la tragedia de unos y otros de sus hijos. Respeta la libertad, también cuando es abusiva.
Pero confiamos que a la vez protege y consuela a los más pequeños, por caminos que entran en el misterio, pero que desembocan en la vida.
Trataremos de ayudarlo, sobre todo en acertar con las trochas que nos despejen el horizonte. Y en todo lo que podamos, humildemente.